Empresas se van del estado, pero no fue por COVID-19: inseguridad y la falta de certeza ahuyentan inversión
Las protestas sociales y poca certeza desde el gobierno han afectado más que la misma pandemia, asegura sector industrial.
Morelia, Michoacán. Por lo menos una empresa industrial ubicada en el Puerto de Lázaro Cárdenas determinó recientemente trasladar su planta de producción a otro estado de la República Mexicana, como consecuencia de las condiciones de inseguridad que encara el sector cada vez que grupos sociales o del magisterio toman las vías ferroviarias, impidiendo el paso del tren y descontrolando los tiempos de entrega de las mercancías.
Así lo destacó durante su toma de protesta del Consejo Directivo 2020-2022, el presidente de la Asociación de Industriales en el Estado de Michoacán AC (AIEMAC), Carlos Enríquez Barajas, quien aclaró que tiene un año al frente de este organismo, pero que por cuestiones de la pandemia del coronavirus no se había realizado el acto protocolario de su nombramiento.
El empresario michoacano señaló que el sector industrial actualmente está encarando una crisis económica, pero contrario al resto de giros comerciales, ésta se debe también al tema de las manifestaciones de grupos sociales que en múltiples ocasiones toman las vías del tren en exigencia de sus demandas con el gobierno y no únicamente por la pandemia del coronavirus, por lo que solicitó a los gobiernos en turno brindar mayor certeza de seguridad para la movilización de los productos de la zona portuaria.
El año pasado se registró una de las tomas más largas que ha tenido que enfrentar el sector, puesto que duró alrededor de los 60 días. De acuerdo con Carlos Enríquez Barajas, presidente de AIEMAC y Francisco Cervantes Díaz, presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), el impacto en pérdidas económicas rondó los 4 millones de dólares, y en el caso particular de Michoacán, ascendió a por lo menos 50 millones de pesos, por cada día no laborado en promedio.
A lo anterior, es importante sumar los daños colaterales que está problemática está generando en el sector, y es que por lo menos una empresa industrial ha determinado migrar a un estado donde sí se puedan controlar los tiempos de entrega de sus productos y que no tengan que depender de si las vías del tren están tomadas o liberadas, refirió Carlos Enríquez.
En este sentido, mencionó que por cuestiones de privacidad de la empresa, no se dará a conocer el nombre de la misma. Sin embargo, adelantó que «con esta decisión se estarán perdiendo, por lo menos 200 empleos directos, a los que habrá que sumar los indirectos y el daño económico que esto ocasionará”, al destacar que en el caso de esta empresa, percibía o percibe un monto importante en cuanto Inversión Extranjera Directa (IED).
Y ante el temor que más empresas decidan retirar su inversión de Michoacán, el empresario pidió a los gobiernos en turno a que brinden certeza al sector, con la intención de que dejen de ser rehenes de las exigencias y demandas de demás sectores de la población.