Al alza, casos activos de COVID-19 en Michoacán; Morelia sigue como epicentro con 424
Durante la jornada del viernes trascendieron 94 casos nuevos detectados en la zona urbana de Morelia, mientras que al menos otra veintena de demarcaciones sumaron casos con una tendencia mucho menos acelerada.
Michoacán superó nuevamente los 800 casos activos de COVID-19. Luego de casi medio año con tendencia a la baja, finalmente los casos positivos repuntaron principalmente en la capital del estado.
Desde el pasado 5 de enero, los reportes diarios de la enfermedad del coronavirus (COVID-19) de la Secretaría de Salud de Michoacán (SSM) refieren un incremento importante en la tasa de detección diaria, con más de 160 nuevos contagios en promedio cada 24 horas.
La tendencia se mantiene hasta este fin de semana y ubica a la ciudad de Morelia de nueva cuenta como el epicentro de los casos positivos con 424 pacientes con contagio activo durante los últimos 14 días.
Solamente durante la jornada del viernes trascendieron 94 casos nuevos detectados en la zona urbana de Morelia, mientras que al menos otra veintena de demarcaciones sumaron casos con una tendencia mucho menos acelerada.
Asimismo, para el corte del sábado, se registraron un total de 112 nuevos pacientes infectados en todo el estado, según la última actualización del reporte epidemiológico de la SSM, al que habría que multiplicarle por 8 para obtener una cantidad más realista de casos, lo que daría más de 6 mil 500 infecciones durante la temporada de fiestas decembrinas. En total, 809 casos activos.
No obstante, no se han presentado decesos y los cuadros graves son mínimos. El reporte de la Red De Infecciones Agudas Respiratorias (IRAG) refiere una tasa de ocupación hospitalaria del 4.79 por ciento con un total de 27 camas ocupadas y 2 camas con ventilador mecánico ocupadas hasta este fin de semana.
Incluso, en cuanto a casos positivos, la gráfica del comportamiento epidemiológico de los últimos días revela una marcada línea ascendente casi completamente vertical de lo que podría ser una nueva oleada de contagios a nivel estatal, la cual ya se anticipaba por el invierno y la temporada festiva.
En los últimos meses, al menos 15 entidades federativas alertaron sobre el repunte de casos. En el caso de Michoacán, las cifras se mantuvieron exentas de dichas tendencias durante prácticamente todo el mes de diciembre y no repuntaron sino hasta el inicio del nuevo año.
Con lo anterior, este inicio de 2023 es el tercer año consecutivo con un incremento casi exponencial en los casos de contagios. Durante enero del 2021 se registró la saturación de hospitales y servicios de oxígeno y en enero del 2022, la ola más explosiva a nivel mundial provocada por la subvariante Ómicron.
En voz del doctor Maximino César Jiménez Zavala, presidente del Consejo Nacional de Certificación en Medicina General de Michoacán, lo anterior también está directamente relacionado con la alta tasa de movilidad registrada durante los últimos meses.
Al igual que en años pasados, las fiestas decembrinas, la alta incidencia de movilidad y la relajación de las medidas de contención derivaron en una situación de mayor riesgo de contagio en cuanto a enfermedades respiratorias se refiere en todo el estado.
“Ya viene otra variante que también está generando preocupación. Ahora los síntomas han cambiado tanto que lo que era la COVID-19 hace casi tres años ahora ya no es igual; ahora es un dolor de garganta, casi no hay fiebre y luego viene la insuficiencia respiratoria o puede haber otros síntomas, como el catarro común, que también tiene que ver con el estornudo, dolor de cabeza, dolor de pecho, para nosotros cualquier gripa es sospecha de COVID-19, para eso solamente sirve la prueba porque los síntomas ya son iguales”, manifestó.
Para este 2023 el panorama sanitario es positivo a nivel local, nacional e internacional. Aún con el surgimiento de las nuevas variantes, la tendencia de mutación del virus ha revelado una debilidad de los síntomas y la tasa de mortalidad.
Asimismo, la vacunación Michoacán ya superó el 90 por ciento de la población en edad con al menos una dosis y una parte importante de la población con dosis de refuerzo, lo que disminuyó los efectos de la pandemia.