La derrota del PRI en Edomex le mete dudas a la rentabilidad de una alianza en la CDMX
El tricolor perdió los comicios y poder de debate dentro de la tríada opositora. El nuevo tablero interno en la previa de las elecciones de 2024.
Durante las últimas semanas, diferentes figuras de la oposición de la capital nacional repetían en público y en privado que el objetivo más importante de la alianza era «mantener la unidad» para llegar con mayor fuerza a las elecciones de 2024, pero la derrota de Alejandra del Moral en el Estado de México cuestiona todos los discursos y pone en crisis a la tríada que componen el PAN, el PRI y el PRD en la capital nacional.
La derrota priista en el estado más populoso y más importante del país no será gratis, y eso lo saben tanto en la oposición como en el oficialismo. Con estos números, a partir de este lunes comenzarán las especulaciones alrededor de una serie de preguntas que, por ahora, no tienen respuestas: ¿Le conviene al PAN permanecer en alianza con el PRI, luego de que el tricolor perdiera su bastión electoral? ¿Le conviene al PRI apoyar a un candidato albiazul en la capital nacional y relegar su propia sigla y relegar, de esta manera, su propia reconstrucción?
Las fuentes del PRI y del PAN consultadas por este medio este domingo mantuvieron el silencio, pero las tensiones internas dentro de la oposición ya existían antes de estas elecciones. El problema, ahora, es que Edomex las agravará y las profundizará. Las discusiones partían alrededor del candidato que la alianza debería presentar en 2024 para disputar la sucesión de Claudia Sheinbaum Pardo. Según pudo saber esta redacción, tanto en el PRI como en el PRD existen resistencias a una posible candidatura del PAN y, además, cierto temor a que el partido albiazul busque imponer su propia boleta sin el consenso de todas las partes.
Con estos resultados, las tensiones no sólo no se esclarecen, sino que se profundizan porque el PRI sale fuertemente desprestigiado de estas elecciones. Importantes figuras del PAN de la capital nacional ya dan por hecho que la boleta de la CDMX será azul y blanca porque, explican, el tricolor se quedó con Coahuila y Edomex. Con estos números, ¿Presentará batalla el PRI? ¿Cómo la llevaría a cabo al tener en cuenta que perdió su bastión electoral por primera vez en 94 años? Y si decide no dar batalla, ¿Aceptará a una figura del PAN o dará un paso al costado y presentará una papeleta propia? Preguntas que al principio de esta semana no tienen respuestas.
Además, con esta derrota la oposición sufre un fuerte golpe a su narrativa triunfalista que sostiene que «Morena está de retirada» o que la victoria opositora es posible en 2024. En la previa de las elecciones, una fuente del PAN en el Palacio de Donceles: «Con Edomex, Morena tendrá mucho más aparato, presupuesto y narrativa. Lo tenemos que evitar». Finalmente, no se evitó y ahora las perspectivas opositoras de cara a las elecciones del año que viene atraviesan nubarrones.
No solo que no evitó la victoria, sino que la propia Sheinbaum Pardo fue una de las grandes ganadoras indirectas de la jornada. , la jefa de Gobierno ideó un operativo político y electoral para garantizar la victoria de Delfina Gómez. Además, hasta el cierre de esta edición, fue la única corcholata de Morena que se mostró junto a la futura gobernadora de Edomex, un punto que también la revitaliza de cara a 2024.
«Se cae la narrativa de que la oposición pueda hacer algo», le manifestó una fuente de Morena a esta redacción antes de que la victoria de Delfina Gómez sea oficial. Con este escenario, el problema para la oposición de cara al futuro es doble: por un lado, se dificulta su mecanismo interno para conformar su boleta; y, por el otro, sufre un importante revés en su camino y anhelo por ganar la capital nacional.