Delfina Gómez se convierte en la primera mujer que gobernará el Estado de México, tras salir victoriosa en los comicios de este 4 de junio en representación del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), PT y PVEM bajo la coalición Juntos Haremos Historia

Durante los comicios del 4 de junio del presente, Delfina Gómez, candidata por la coalición Juntos Haremos Historia (Morena, PT y PVEM)  a la gubernatura del Estado de México, se impuso con el 53.4% de los votos ante su contendiente, Alejandra del Moral, quien representó a la coalición Va por México (PRI, PAN, PRD y Nueva Alianza).

Así, el Partido Revolucionario Institucional pierde una hegemonía de 94 años en la entidad federativa (si se considera al PNR, antecesor del PRI), lo que supone un futuro incierto para esta fuerza política. Además, por primera vez en su historia, el Estado de México tendrá a una mujer para el cargo de gobernadora.

En el otro frente nacional, la coalición Va por México (PRI, PAN y PRD) logró la gubernatura del Estado de Coahuila, con su candidato Manolo Jiménez Salinas quien aventajó ampliamente a sus demás contrincantes con el 56% de la votación, con más de 520 mil sufragios en su favor. En esta contienda, resaltó la pobre participación del candidato de Morena, Armando Guadiana Tijerina, quien hasta el momento se alza como el peor candidato en la historia de su partido, con menos del 25% de los votos hasta ahora contabilizados.Con respecto a la contienda por el Edomex, fue Alejandra del Moral Vela quien se dirigió vía cadena nacional a la audiencia mexicana, para reconocer la victoria de la candidata Delfina Gómez, admitiendo que los datos del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) no le favorecieron. En este sentido, trascendió que desde horas antes, los líderes de los partidos PRI, PAN y PRD abandonaron a Ale del Moral para dirigirse a Coahuila rumbo al festejo de su candidato Manolo Jiménez.

A diferencia de otros comicios en años anteriores y en otros puntos del país, la presnete contienda no registró importantes incidencias que comprometieran su realización; lo que se tradujo en una jornada electoral pacífica para los mexiquenses.