PRD y Acción Nacional presentan quejas contra del titular del Ejecutivo
PRD y PAN interpusieron ante el Instituto Nacional Electoral (INE) quejas contra el presidente Andrés Manuel López Obrador por los comentarios emitidos en la mañanera del miércoles de esta semana.
El blanquiazul insistió en su petición, expuesta en otros episodios, de que las conferencias matutinas de Palacio Nacional sean suspendidas, “por la reiteración de conductas antijurídicas”.
A su vez, el PRD sostuvo que el Presidente “vuelve a la carga” y desobedece las resoluciones del INE y del Tribunal Electoral, por lo cual solicitó a estas autoridades hacer “un llamado enérgico” y, además, sancionar a Morena por los “beneficios indebidos” que recibe del funcionario.
Subrayó que el Presidente de la República ha asumido una conducta “reiterada y contumaz”, por lo que exige se emita una nueva medida cautelar de tipo “inhibitoria”, eliminar extractos de la mañanera del 26 de julio y que la Presidencia emita un comunicado de disculpa pública.
Si bien se solicita la aplicación de medidas urgentes, el caso debe ser investigado por la Unidad Técnica de lo Contencioso del INE porque la queja es por uso indebido de recursos públicos, violación a los principios de legalidad, certeza, neutralidad e imparcialidad, así como la vulneración a la medida cautelar dictada hace unos días por la Comisión de Quejas y Denuncias INE, en el sentido de que el Presidente se abstenga de opinar de temas electorales.
Por separado, el PAN subrayó que los dichos del funcionario buscan descalificar los procesos políticos “e inmiscuirse en la vida interna de los partidos políticos de oposición”, “incitar a la violencia desde Palacio Nacional” y desacreditar al frente opositor.PUBLICIDAD
Señaló que en los hechos denunciados hay frases “de las cuales se desprende calumnias en contra de otras fuerzas políticas”.
El Presidente presentó en la conferencia de prensa matutina del miércoles encuestas que colocan a Morena en la delantera en la carrera de la sucesión presidencial y declaró que lo hacía por “única ocasión” para demostrar que no hay ninguna razón para dañar a sus adversarios.