Casa Toreros y Arturo Gilio
Estimado Arturo,
Desde niño, has estado inmerso en el mundo de la tauromaquia, persiguiendo con determinación ese sueño que te llevará a convertirte en una figura del toreo mundial. Para mí, ha sido un inmenso orgullo acompañarte en este camino y representar tu carrera durante los últimos cuatro años.
En este tiempo, hemos compartido no solo los triunfos y los éxitos, sino también el esfuerzo, el trabajo duro, y esos momentos que ponen a prueba nuestro espíritu. A lo largo de esta etapa, hemos vivido juntos momentos inolvidables, como tu alternativa en Acho, de la mano de las máximas figuras del toreo, Julián López «El Juli» y Andrés Roca Rey. Ese día, y muchos otros, quedarán grabados en la memoria de quienes te admiramos.
Hoy, por motivos personales y empresariales, llega el momento de seguir caminos diferentes. Sin embargo, quiero agradecerte profundamente la confianza que depositaste en Casa Toreros para guiar tu carrera profesional. Haber sido tu apoderado es un honor que llevo con orgullo, y siempre presumiré haber tenido la oportunidad de apoyar tu crecimiento como matador.
Aunque formalmente nos separemos en lo laboral, en Casa Toreros siempre serás un torero de casa. La amistad entre nuestras familias ha sido, y seguirá siendo, uno de los pilares más sólidos de nuestra relación, y eso es algo que valoro inmensamente.
Seguiremos apoyándote, siempre listos para aportar nuestro granito de arena en tu carrera. Estoy seguro de que llegarás a lo más alto, como siempre lo hemos soñado y trabajado juntos.
Con un fuerte abrazo y los mejores deseos para tu futuro.
