Estrategia «Aprende en casa»
Gonzalo Roja |
Desde el 23 de marzo, la Secretaría de Educación Pública (SEP) lanzó «Aprende en Casa», una estrategia de teleeducación destinada a proporcionar continuidad a los programas de educación pública básica ante la emergencia causada por la COVID19. Este programa echa mano tanto de medios tradicionales como digitales. Mediante programas de transmisión de TV abierta y plataformas de Internet se comparte una gran variedad de material con el objeto de llegar a la mayoría de los estudiantes de todos los perfiles educativos. La estrategia incluye un sitio web donde los estudiantes pueden encontrar videos, consejos, podcasts, videojuegos, libros de texto gratuito y, lo más importante, una serie de actividades y tareas diarias diseñadas para cada nivel. Las actividades se presentan en un calendario semanal. La estrategia representa un importante esfuerzo para subsanar la ausencia física de alumnos y profesores durante esta crisis nunca antes vivida. Sin embargo, es posible identificar algunos retos como el desarrollo de habilidades digitales y la cobertura incompleta de infraestructura de telecomunicaciones. En cuanto a las habilidades digitales, tanto las madres y padres de familia, así como los alumnos con dificultades para hacer la tarea pueden contactar a un maestro que les brinde apoyo telefónico o por correo electrónico. En el caso de la cobertura, el reto no está en las herramientas radiodifundidas, pues, a través de los sistemas de transmisión (Televisión Educativa y Canal Once), la SEP puede llegar hasta el 92.5% de los hogares. El reto se encuentra en el contenido del sitio web de la estrategia al cual solo se puede acceder mediante internet. De acuerdo con la ENDUTIH, solamente 44.3% de los hogares mexicanos cuenta con una computadora y 56.4% cuenta con acceso a Banda Ancha Fija (BAF). En este sentido, es recomendable aprovechar las tecnologías móviles cuyo alcance permitiría llegar a más usuarios de la comunidad educativa. La Banda Ancha Móvil (BAM) que tiene una penetración de 92% de las personas y los 125.8 millones de smartphones en el mercado serían un complemento relevante en la distribución de contenidos educativos. Sin lugar a dudas, Aprende en Casa es una excelente estrategia de teleeducación que llegó para quedarse. Su composición, contenidos y evolución serán útiles en la construcción de una política de educación a distancia más allá de la emergencia. Si bien la estrategia puede verse limitada por la baja penetración de BAF en el país, la cobertura de las telecomunicaciones móviles que alcanza 96% de la población del país y el elevado número de usuarios de dispositivos móviles, representan, en conjunto, una importante oportunidad para su robustecimiento. |