Arturo Gilio, toca la gloria y conquista a La México

Faena de rabo que abre la puerta grande saliendo a hombros con dos orejas para el joven lagunero Arturo Gilio, en la novillada de Aniversario de La Plaza México.


Durante su primer faena ante “Artista” de 440 kg.,  Arturo se lució desde el inicio de su faena con unas verónicas muy templadas y, con la muleta,  Arturo llevó al burel muy cosido a la tela con derechazos muy templados, sellando sus tandas con pases de pecho muy poderosos barriendo el lomo del novillo de pitón a rabo. Faena llena de valor, el cual heredó de su padre. Pincha y deja estocada para recibir fuerte petición de oreja que el juez no concede. Termina dando vuelta al ruedo.

Con el segundo de su lote de nombre “Arquitecto” de 461 kg., Arturo salió totalmente entregado desde el inicio de faena, quites variados con el capote que calentaron los tendidos, después con la muleta rodillas al piso, llevando al novillo templadamente y terminando con una arrucina muy ceñida. El rugir de La México se dejó sentir con los “olés” durante cada pase, ante un codicioso ejemplar de Núñez del Olmo, que se iba a más. Conectó tandas por ambos lados aprovechando la fuerza del novillo con la que acometía a la tela. Ya con la plaza entregada y con la petición de indulto en los tendidos, cogió la espada y pegó un soberbio estoconazo que hizo rodar al toro sin puntilla, ante los gritos de «torero torero», una fuerte petición de rabo que el juez negó, otorgándole dos orejas de mucho peso y saliendo a hombros ante la algarabía de la afición que se entregó con el novillero.

“Toda mi vida soñé en salir a hombros en la México, y ahora te puedo decir que es un sueño hecho realidad.”
Arturo Gilio Quintero