Michoacanos no confían en poder del voto: más de la mitad no acudieron a las urnas
La pandemia, una gran polarización, falta de tiempo y de conocimiento de los perfiles son algunas de las razones por las que las personas no acudieron a votar.
Morelia, Michoacán. El abstencionismo en Michoacán superó la tendencia de falta de participación de votantes a nivel nacional. Más de la mitad de los ciudadanos inscritos en el padrón electoral, estimado en más de 3.5 millones de personas mayores de 18 años, no ejerció su derecho al voto en esta jornada.
Especialistas llaman a prestar atención al tema, toda vez que, históricamente, es la mitad de los mexicanos la que termina decidiendo mediante su voto el rumbo del país y a sus gobernantes y representantes.
A nivel nacional se estimó, a través de los conteos rápidos un estimado de 48 por ciento de abstencionismo, cifra que va en contra de los pronósticos advertida ante las elecciones de entidades federativas, municipales y de diputaciones de ambos niveles del legislativo.
Para el caso de Michoacán, la cifra de ciudadanos que se abstuvieron en los comicios fue superior en casi 9 por ciento al último proceso electoral. Organismos civiles y electorales reportaron que un 42 por ciento de los michoacanos no votaron en 2018, lo que advierte una creciente tendencia de desinterés en los temas de votaciones, toda vez que para la presenta elección se tuvo una abstención que rondó entre el 47 y el 48 por ciento, de acuerdo a los datos estimados por el Programa de Resultados Electorales Preliminares.
Señal de alerta
En opinión del doctor Humberto Urquiza, especialista en Derecho Electoral y conocedor de los procesos de este tipo, lo anterior no se debe de interpretar como un fracaso de la democracia o del sistema político electoral de la actualidad, tal como se ha llegado a interpretar en diversas opiniones.
No obstante, señaló que sí se deben de repensar cuáles son las fallas que están presentando tanto en los organismos electorales y partidos políticos para atraer a la población a las urnas para procesos electorales consecuentes.
“Efectivamente, el abstencionismo es uno de los grandes presentes en este proceso electoral y creo que es uno de los elementos que llama la atención”, dijo.
“Me parece que es un tema que, si bien no se puede llamar fracaso, sí debe de llamarse foco de atención, porque la tendencia que se había marcado en los últimos procesos estaba arriba del 50. La expectativa que se había planteado era una participación más amplia por diversas variables”.
Humberto Urquiza, especiaiista
Entre las justificaciones que más se escuchan entre quienes no votaron fue la falta de tiempo, de conocimiento sobre los perfiles, desinterés e incluso por cuestiones de que se encuentran fuera de sus lugares de origen y no pudieron encontrar y ubicar una casilla especial.
Asimismo, para este proceso electoral se previó que el temor a contagios de COVID-19 fuera otro de los aspectos que inhibiera la intención de participación política electoral de los más de 3.5 millones de ciudadanos registrados en el padrón electoral. Situación que, parece, finalmente sí afectó, tal como se preveía.
La corrupción, falta de resultados de los gobiernos actuales y otros factores como la polarización política han propiciado a nivel nacional un desencanto y hartazgo que se ha visto reflejado en la cada vez más escasa votación, según han destacado diversos estudios realizados en el último año.
Al respecto, Humberto Urquiza aseguró que a partir de este 2021 será el principal reto a atender, tanto de los consejeros de los organismos electorales como de los partidos políticos, el fomentar la participación de los ciudadanos n la toma de decisiones y en la democracia representativa a través de los comicios.
“El hecho de que la gubernatura siempre hace más atractivo el fenómeno político en Michoacán no influyó. En el estado y el país el abstencionismo fue del 50 por ciento en lo local y el 48 por ciento en lo federal. Algo falló, algo no funcionó y los organismos electorales y partidos quedaron a deber elementos, condiciones, atractivos para que los ciudadanos salieran a votar. El abstencionismo debe de tener una traducción y es un actor que debe estar visibilizado porque es un mensaje que la ciudadanía está mandando y que debemos de tomar en cuenta”, manifestó.
No existe confianza
Durante los últimos años tanto los organismos electorales, organizaciones de la sociedad civil y partidos políticos en general han emprendido campañas mediáticas a través de medios digitales y tradicionales para vencer este fenómeno En la mayor parte del territorio nacional no han tenido éxito en la encomienda.
A nivel nacional, según números del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI), hasta un 76.4 por ciento de ciudadanos de 15 años y más dijeron confiar poco o nada en los institutos políticos. En paralelo, las instituciones como los gobiernos estatales y poderes legislativos se han desplomado en la percepción de confianza de la ciudadanía.